Afrontar el duelo por una discapacidad adquirida
Tiempo de lectura: 3:30 min.
Vivir con una discapacidad adquirida puede ser uno de los momentos más desafiantes de tu vida. Enfrentas no sólo cambios físicos, sino también emocionales que pueden sacudir la forma en que te percibes, tus relaciones y tu proyecto de vida. Si te encuentras transitando este proceso, recuerda que el duelo no es exclusivo de la pérdida de un ser querido; también surge al perder capacidades, independencia o sueños que tenías para el futuro. Este artículo te acompaña a explorar el duelo por una discapacidad adquirida, mostrándote que la esperanza, la adaptación y el bienestar siguen presentes, más allá de la pérdida.
Reconociendo tu duelo
Quizás sientas tristeza, enojo, ansiedad o miedo ante la nueva realidad. Estos sentimientos son una respuesta natural a cualquier cambio brusco en la vida. Por ejemplo, podrías preguntarte: “¿Por qué me pasó esto a mí?” o “¿Podré volver a hacer las cosas que disfrutaba?”. También es común experimentar una sensación de injusticia o incluso culpa, aunque no sean emociones fáciles de expresar. Las investigaciones muestran que después de adquirir una discapacidad se experimenta ansiedad y preocupación extrema que impide el manejo adecuado de las emociones (Moreno, 2020). Recuerda que todas estas emociones son válidas y forman parte de tu proceso de adaptación.
Fases del duelo: un viaje no lineal
El duelo no es un camino recto ni idéntico para todas las personas. Puedes experimentar negación, ira, negociación, depresión y aceptación (Kubler-Ross y Kessler, 2016). Tal vez un día te sientas con ganas de enfrentarlo todo y al siguiente, el desánimo te gane. Por ejemplo, Ramón, una persona con discapacidad visual adquirida, puede experimentar días donde parece que todo va mejorando, seguidos por momentos de tristeza profunda. Permítete sentir sin juzgarte; la recuperación emocional es tan única como tú.
Redefiniendo tu identidad
La discapacidad no define quién eres, aunque al principio pueda sentirse así. Las personas que adquieren una discapacidad enfrentan diversos desafíos emocionales y barreras sociales, pero también desarrollan procesos de resiliencia importantes (Alarcón et al., 2025). Imagina a Carla, quien tras un accidente tuvo que dejar de practicar atletismo. Al inicio, pensó que ya nada tenía sentido, pero con el tiempo descubrió nuevas formas de expresarse, desarrolló habilidades en la pintura y encontró un grupo de apoyo donde se sintió validada. Aceptar la nueva versión de ti mismo/a implica abrirte a la posibilidad de descubrir otros intereses y talentos.
Estrategias para afrontar el duelo
Es fundamental buscar apoyo y rodearte de quienes te escuchen sin juzgar. La investigación demuestra que la adaptación exitosa a una discapacidad adquirida está más relacionada con los recursos ambientales y las variables psicosociales que con las características de la lesión (Giardini y Sales, 2007).
También puedes:
- Permítete pedir ayuda. No tienes que demostrar fortaleza todo el tiempo. Reconocer tus límites es un acto de valentía.
- Establece rutinas. Aunque la vida cambió, mantener ciertos hábitos diarios aporta estructura y seguridad.
- Prueba nuevas actividades. Explora opciones adaptadas a tus necesidades, como deportes paralímpicos, talleres creativos o nuevos pasatiempos.
- Sé amable contigo mismo/a. Los días difíciles llegarán, pero también lo harán pequeños logros si te permites avanzar a tu ritmo.
- Desarrolla estrategias de afrontamiento. Las investigaciones sugieren que las estrategias de afrontamiento efectivas y la resiliencia mejoran significativamente el pronóstico de adaptación (Nevado et al., 2024).
¿Cuándo buscar ayuda profesional?
Si el dolor emocional te supera o sientes que vives permanentemente abrumado/a, es importante buscar acompañamiento. Hablar con un/a tanatólogo/a puede proporcionarte herramientas para atravesar el duelo y brindarte un espacio seguro donde sanar a tu modo y en tus tiempos. Los estudios demuestran que el duelo alto predomina en un 76.4% de los casos, especialmente en personas que han experimentado pérdidas significativas, evidenciando la necesidad de intervenciones específicas. (Medina et al., 2025).
Recuerda: la posibilidad de adaptación y bienestar existe
Adquirir una discapacidad implica una transformación significativa, pero no significa que tu vida pierda sentido. Al aceptar tu proceso y darte el tiempo necesario, puedes reencontrarte con una versión diferente pero igual de valiosa de ti mismo/a.
Si sientes que necesitas más apoyo, te invitamos a generar una cita con cualquiera de las y los tanatólogos que forman parte de nuestra plataforma. No tienes que transitar este camino en soledad:
Este artículo se hizo con información de:
Alarcón Martínez, E. A., Salas Villalba, D. M., De La Rosa Mendoza, M., Kerguelen Soto, J. F., López Díaz, N. S., y Bula Pico, S. E. (2025). Ecos de resiliencia en medio de una discapacidad visual. Revista Latinoamericana De Calidad Educativa, 1(1), 67-71. https://doi.org/10.70625/rlce/214
Giardini Murta, S., y Sales Guimarães, S. (2007). Enfrentamento à lesão medular traumática. Estudos de Psicologia, 12(1), 57-63. https://www.redalyc.org/pdf/261/26112107.pdf
Kubler Ross, E., y Kessler, D. (2016). Sobre el duelo y el dolor. Editorial Luciérnaga.
Medina Vera , D. B., Nagua Sihua, K. J., y Sotomayor Preciado , A. M. (2025). Estrategias de enfermería basadas en la teoría de la adaptación para manejo efectivo del duelo: LATAM Revista Latinoamericana De Ciencias Sociales Y Humanidades, 6(1), 1930–1942. https://doi.org/10.56712/latam.v6i1.3464
Moreno Martínez, M. (2020). El proceso de duelo en un paciente con lesión medular. Metas de Enfermería, 23(1), 65-71. https://doi.org/10.35667/MetasEnf.2019.23.1003081528
Nevado, R., Arteaga, A., Badía Martínez, M., y Fernández-Montalvo, J. (2024). Consecuencias psicológicas de las amputaciones por accidente laboral. Revista Española de Salud Pública, 98, 1-13. https://pdfs.semanticscholar.org/924d/1cd07b316175a58f60a840e5a4df671b4937.pdf
*El contenido de este artículo se redacta sólo con fines informativos. No puede servir como diagnóstico. tratamiento o recomendación de un profesional. Consulta con tu especialista ante cualquier duda.
