Descubre cómo romper ese patrón
Tiempo de lectura: 3:30 min.
El término “migajero” viene de las migajas de pan: esos pequeños restos que suelen usarse para alimentar aves o para preparar recetas secundarias. Son partes resecas, lo que sobra de un alimento completo y fresco.
Cuando se habla de ser “migajero del amor”, se hace referencia a la persona que se conforma con mínimos gestos de cariño de alguien que le gusta, aunque a cambio reciba desaires, indiferencia o incluso momentos hostiles. Por ejemplo, puedes conformarte con mensajes dulces de alguien, aunque nunca se concreten en citas, muestras reales de interés o un vínculo estable (Martínez, 2023).
En otras palabras, ser “migajero” significa aceptar lo mínimo, sentirte satisfecho/a con expresiones pequeñas de afecto, sin exigir más ni establecer límites claros. Aunque este concepto no es un término clínico dentro de la psicología, se ha popularizado en el lenguaje cotidiano como una forma de describir relaciones desequilibradas.
De hecho, en inglés ya existía desde hace algunos años con el nombre de breadcrumbing, que empezó a estudiarse alrededor de 2023 y se observa con frecuencia entre jóvenes.
Según Raúl Navarro Olivas, profesor de Psicología en la Universidad Castilla-La Mancha (España), el breadcrumbing es un patrón en el que una persona (llamada breadcrumber) muestra interés de manera intermitente y constante, sin intención real de comprometerse ni de construir una relación formal (Ávila, 2023).
Navarro compara este comportamiento con el funcionamiento de las máquinas tragamonedas en un casino: nunca sabes cuándo va a llegar el premio, así que sigues intentando. Lo mismo pasa en estas relaciones: recibes un gesto positivo de vez en cuando, pero acompañado de silencios, indiferencia o incluso rechazo. Ese refuerzo intermitente es lo que te engancha.
Señales de una relación basada en migajas
- Desequilibrio emocional: eres tú quien dedica más esfuerzo, tiempo y energía, mientras la otra persona apenas aporta.
- Valorar en exceso pequeños gestos: un mensaje ocasional, un detalle mínimo o un momento esporádico se perciben como grandes actos, porque no hay algo más sólido detrás.
- Justificar el desinterés: puedes convencerte de frases como “no sabe expresar sus sentimientos” o “en el fondo sé que me quiere”, aun cuando la realidad muestra lo contrario.
- Miedo a la soledad: muchas veces aceptas menos de lo que mereces sólo para no quedarte sin compañía (Encinas, 2025).
El problema es que esta dinámica puede afectar tu salud mental: baja autoestima, dependencia emocional, frustración y tristeza son consecuencias comunes. Como explica Navarro, es dañino porque ataca una de las necesidades psicológicas más importantes: el sentido de pertenencia y la capacidad de vincularte con otras personas. Incluso puede llevarte a lo que se conoce como indefensión aprendida: creer que todos tus intentos de tener una relación sana están condenados a fallar.
Un estudio publicado en el Journal of Environmental Research and Public Health señala que experimentar breadcrumbing aumenta la insatisfacción con la vida, los sentimientos de soledad y la sensación de desamparo (Ávila, 2023).
¿Cómo dejar atrás el patrón de migajas emocionales?
- Reconoce la situación: aceptar que estás en una relación desequilibrada es el primer paso para cambiar.
- Trabaja en tu autoestima: fortalecer tu amor propio te permite establecer límites y buscar vínculos más justos.
- Pon límites claros: aprender a decir “no” a lo que no te da paz incluye dejar atrás relaciones que no suman a tu bienestar.
- Busca apoyo profesional: hablar con una persona especialista puede ayudarte a identificar patrones de dependencia y darte herramientas para construir relaciones más saludables (Encinas, 2025).
Este fenómeno también refleja lo que Zygmunt Bauman llamó el “amor líquido”: relaciones frágiles, poco comprometidas y cada vez más efímeras. En un mundo donde lo inmediato suele pesar más que lo profundo, el breadcrumbing se convierte en una señal clara de cómo la cultura actual puede empujarte a aceptar menos de lo que mereces.
Aceptar migajas en el amor no sólo limita tu bienestar emocional, sino que también te aleja de relaciones auténticas y satisfactorias. Reconocer este patrón, trabajar en tu autoestima y establecer límites claros te permite construir vínculos más equilibrados y nutritivos. Recuerda que mereces cariño genuino, atención recíproca y respeto; no tienes que conformarte con lo mínimo. En Integral-mente contamos con especialistas de la salud mental que te ayudarán a aprender a valorarte y priorizar tu bienestar, conoce más sobre su experiencia profesional, aquí:
Este artículo se hizo con información de:
Ávila Claudio, R. (2023). Qué es el “breadcrumbing”, las migajas emocionales que algunas personas usan como método para manipular. BBC Mundo. https://www.bbc.com/mundo/articles/c4n850q4eq9o
Encinas, M. G. (2025). Qué significa ser migajera o migajero en el amor. En Pareja. https://www.enpareja.com/romance/Que-significa-ser-migajera-o-migajero-en-el-amor-20250330-0005.html
Martínez, M. L. (2025). Qué significa ser “migajera”, nueva palabra de moda para relaciones amorosas. Infobae. https://www.infobae.com/mexico/2025/04/17/que-significa-ser-migajera-nueva-palabra-de-moda-para-relaciones-amorosas/
*El contenido de este artículo se redacta sólo con fines informativos. No puede servir como diagnóstico. tratamiento o recomendación de un profesional. Consulta con tu especialista ante cualquier duda.
